El Sello del Dios vivo en los escogidos de Dios, lo cual nos da seguridad

(Segunda actividad)

En Ezequiel, capítulo 9, es lo que hemos venido hablando, de ese Ángel con el tintero en Su cintura. Ezequiel, capítulo 9, verso 1:

Ezequiel 9:1

1 Clamó en mis oídos con gran voz, diciendo: Los verdugos de la ciudad han llegado, y cada uno trae en su mano su instrumento para destruir.

2 Y he aquí que seis varones venían del camino de la puerta de arriba que mira hacia el norte, y cada uno traía en su mano su instrumento para destruir. Y entre ellos había un varón vestido de lino, el cual traía a su cintura un tintero de escribano; y entrados, se pararon junto al altar de bronce ([JBP] eso es juicio).

[JBP] Por eso ese Ángel con el Sello del Dios vivo es este Ángel que le dice que… le ordena a los cuatro ángeles que “no sople viento alguno hasta que hayan sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios (los 144.000)” [Apocalipsis 7:2-4]. Ese Ángel le da orden: que no haya guerras, que no haya una Tercera Guerra Mundial.

Y él escribe ahí: [WSS] «Daniel 12».

[JBP] Ese es Miguel. ¿Ve? “En aquel día se levantará Miguel, el gran Príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo”.

O sea que con la aparición de la Venida del Señor (Miguel es Cristo), ¡ah!, entonces hay un lapso de tiempo que Dios detiene la guerra - las guerras. Hay rumores, guerras, tratados de paz; vuelve y se tranquiliza; vuelve la guerra o… Pero hay un tiempo de… se dice que no haya guerra.

Pero mira Ezequiel cómo habló ahí, profetizó de esto. ¡Pero mira la labor tan grande!

3 Y la gloria del Dios de Israel se elevó de encima del querubín, sobre el cual había estado, al umbral de la casa; y llamó Jehová al varón vestido de lino, que tenía a su cintura el tintero de escribano,

4 y le dijo Jehová: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella.

[JBP] Lo que leímos el… ayer (el saludo* de 8 minutos, más o menos), en el mensaje “LIDERATO”, que el hermano Branham habló de eso: “A los que gimen y claman”.

*[Estudio “El Ángel por las iglesias y ciudades sellando los que gimen y claman”, 2025/jun/05 (junio): 65-1207 “Liderazgo”, párrs. 316-321]

5 Y a los otros dijo, oyéndolo yo: Pasad por la ciudad en pos de él, y matad; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia.

6 Matad a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno; pero a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no os acercaréis; y comenzaréis por mi santuario ([JBP] por la Casa. Dibuja una Estrella de David ahí). Comenzaron, pues, desde los varones ancianos que estaban delante del templo ([JBP] los ministros).

[Dr. José B. Pérez] Ahora mira, el hermano Branham nos habla aquí, en este mensaje, algo parecido a lo que nos habló en “LIDERATO”, que fue en el 65, en diciembre; y esto fue en el 58: “LA EVIDENCIA DE LA RESURRECCIÓN”; un parrafito él dice:

[58-0406E “La evidencia de la Resurrección”, párr. 61]

61 Hermano, hermana, ¿sabe usted que la Biblia dice que el Espíritu Santo marca solo a aquellos que gimen y claman por las abominaciones hechas en la ciudad?

[JBP] “Solo a aquellos que claman y gimen”. Romanos 8, que fue la Escritura que habíamos leído o citado.

[61] Ahora, quiero hacerles una pregunta. Tenemos tanta emoción por nuestras ideas religiosas, pero ¿quién en la ciudad, esta noche, de Jeffersonville, estará tan preocupado por el mundo perdido, en este último día, que aun pase treinta minutos en la noche orando por los pecados de la ciudad? Pero, conforme a la Escritura, el Ángel de Dios solo debía sellar a aquellos que gemían y clamaban por la abominación.

[Dr. José B. Pérez] Ahora mira, en Los Sellos, él ahí en la página 62, él dice, leyendo de Efesios 1:13, lee esa Escritura y dice:

36. Usted puede ver aquí que el Espíritu Santo mismo es un Sello. Y un sello ¿de qué da testimonio? De una obra consumada. El Espíritu Santo es el Sello para el individuo. Y aquel individuo cuando recibe el Espíritu Santo allí termina su tiempo de gemir ([JBP] ¡Ush! ¡Qué tremendo!), porque ya es una obra completa.

[JBP] ¡Jej! ¡Cómo lo sella ahí!

Y entonces mira lo que hace él: dibuja una Piedra Angular y las edades, y le escribe: [WSS] «el Espíritu Santo» en la Piedra Angular. ¡Qué tremendo eso!

Y más abajito él dice:

38. Ahora, retenga esa palabra REDENCIÓN, porque hasta el día en que el Libro de la Redención haya sido revelado y el Redentor venga para reclamar Su posesión, nada puede romper ese Sello. No contriste usted al Espíritu Santo. Haga más bien las cosas que agradan a Dios, porque el Libro está sellado, y usted también está sellado. El Espíritu Santo mismo es el Sello. Un sello significa (ahora, estas son las palabras que sacamos del diccionario): “una obra consumada”. Ahora, cuando el séptimo sello es roto ([JBP] escribe): [WSS] «el 7mo Sello», el misterio de Dios que ha estado sellado en estos siete sellos misteriosos es entonces finalizado hasta el día cuando ese sello sea roto y sea revelado lo que está por dentro. Si alguien pregunta: “¿Qué hay en este vagón?”. Pues le responden: “Se supone que sea tal y cual cosa”. En eso alguien está suponiendo cuando dice qué DEBE HABER. Pero cuando el sello es roto y la puerta se abre, entonces vemos por dentro y vemos exactamente lo que contiene. ¿Ve usted lo que le digo? Y esto solamente sucederá en el fin del tiempo.

[JBP] Cuando Él toma el Título y lo entrega a ese hombre, ahí es que ocurre todo eso.

39. Otra cosa que un sello significa es POSESIÓN. El sello tiene una marca que señala a quién pertenece el contenido.

[JBP] Por eso cuando ese Ángel lo sella, al escogido, ¿a quién pertenece ese escogido? A Dios. ¡Ya usted está sellado hasta el día de la redención!, ¡y usted es una posesión de Dios! ¡Jej!

[39]. El sello tiene una marca que señala a quién pertenece el contenido.

[JBP] Porque usted, al ser alma viviente y ser templo de Dios, y el estar el Espíritu Santo en el alma, pues el Espíritu Santo ¿de quién es? De Dios; pues entonces el contenido pertenece a Dios; por lo tanto, ¡usted pertenece a Dios!

[39]. Cuando usted es comprado por la Sangre de Jesucristo y sellado por el Espíritu Santo, ya no pertenece al mundo ni a las cosas del mundo, es más bien una posesión de Dios.

40. También, un sello significa SEGURIDAD. El Sello significa que usted está seguro. Ahora, ustedes que no creen en la seguridad eterna, pues no sé; pero un sello significa que la cosa está segura hasta llegar a su destino. ¡Pobre de aquel que trate de romper ese Sello! ([JBP] ¡Uff!). El Sello del Espíritu Santo no puede ser roto.

[JBP] Por eso pasará lo mismo que pasó en Egipto, cuando ese ángel de la muerte pasó; y todo aquel que no tenía la señal colocada en el dintel y las puertas, los postes de la casa: todo primogénito iba a morir [Éxodo 12:21-30].

Y ahora, miren Ezequiel, capítulo 9: ese ángel de la muerte es el que estará rondando la Tierra, para derramar los juicios divinos en la gran tribulación; pero antes de eso, como el juicio comienza por la Casa, entonces eso va a comenzar antes de la gran tribulación. Y todo aquel que no tenga, en el dintel y los postes del alma, el Espíritu Santo, y esté sellado con el Sello del Dios vivo, entonces la muerte (que es la última plaga, la muerte espiritual) queda marcada en esa persona, y entra vivo a la gran tribulación, ya para luego morir físicamente.

Por lo tanto, lo que está Dios haciendo en este tiempo es sellando a aquellos que gimen y claman para que escapen de los juicios; lo cual no va a haber misericordia ni de anciano, ni de niño, ni de joven, ni de virgen, ni de nadie: todo aquel que no esté sellado con el Espíritu Santo en el alma.

“EL SELLO DEL DIOS VIVO”. El Sello… el Sello, que es la posesión, una seguridad.

Sería: “EL SELLO DEL DIOS VIVO EN LOS ESCOGIDOS DE DIOS, LO CUAL NOS DA SEGURIDAD”.

¡Oh, qué seguridad tan grande!, ¡y qué bendición tan grande! ¡Y qué misericordia tan grande Dios ha tenido!, que ha retenido a esos cuatro ángeles hasta que ese Ángel selle a todos los escogidos de Dios, incluyendo el pueblo hebreo.

Por lo tanto, estamos seguros porque le pertenecemos a Él. Al estar sellados en el alma, en el corazón, le pertenecemos a Él; y como le pertenecemos a Él, entonces Él nos va a librar, y escaparemos de los juicios divinos de la gran tribulación; porque eso es ASÍ DICE EL SEÑOR.

Hoy, sábado 7 de junio de este año 2025, en estas pequeñas palabras que podemos completar con eso que hablamos, esos 8 minutitos también, del día del jueves. O sea que Dios nos ha ido dando un poquito más de esa línea, la cual es muy importante: entender ese misterio de ese Ángel sellando en el alma, en el corazón, de cada escogido.

Bueno, que Dios les bendiga y les guarde; y buen provecho. Buen provecho.